jueves, 13 de julio de 2023

Makes The Heart Grow Fouler - Carrie Aarons



Nunca conozcas a tu héroe, porque probablemente resulte ser un villano.
Ni siquiera se me pasó por la cabeza cuando la revista para la que trabajo me encargó un artículo sobre Dane, el mejor cantante country de nuestra generación. Ya sabes, el tipo de celebridad que no necesita apellido porque es muy prolífica.
Además de ser uno de mis artistas favoritos, este hombre notoriamente reservado nunca ha concedido una entrevista en sus veinte años de carrera, así que este artículo podría ser mío. Por desgracia, desde el momento en que pongo un pie en su enorme complejo de Texas, Dane está decidido a romperlo.
Entre sus miradas gélidas, sus gestos lascivos y sus comentarios burlones, el plazo de una semana para hacerle mis preguntas va y viene con cero respuestas. Pero, por alguna razón, no se retira del artículo. Y cuando insiste en que me mude a su casa de invitados para poder observarlo, ya que se niega a sentarse cara a cara, no me queda más remedio que aguantarme por mi trabajo.
Después del año que he pasado, y del mundo exterior del que ya no quiero formar parte, la reclusión es casi bienvenida. Eso, si no incluyera a una reclusa sexy que parece empeñada en meterse conmigo. Trabajar con alguien a quien desprecio no sería tan duro si significara volver a casa al final del día.
Desde su accidentado pasado, pasando por los rumores sobre su vida amorosa, hasta el hecho de que desapareció de la escena musical hace cinco años, pasando por la hija adolescente a la que ha criado como padre soltero toda su vida... hay tanto que desentrañar para conocer la verdad sobre el hombre enterrado bajo la tinta que cubre su piel.
Pero el verdadero peligro llega cuando Dane deja caer la cortina por completo, permitiéndome ver cada lado de él. Porque me dan ganas de mostrarle cada parte dañada de mí misma.
Excepto que dos personas tan opuestas, pero igualmente rotas, nunca pueden encontrar un felices para siempre. Especialmente porque un villano no tiene corazón. Entonces, ¿qué hago cuando el héroe caído que no puedo tener quiere darme el suyo?

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