Se suponía que matricularme en la BCU iba a ser mi oportunidad de libertad. Un escape de mis padres que insisten en que siga sus pasos como Guardián de la Sociedad.
Mantener a salvo a los miembros: eso es lo que se supone que debo hacer. Pero, ¿cómo puedo proteger a los alumnos si ni siquiera puedo protegerme a mí misma?
Alguien me ha estado observando.
Sus ojos se clavan en mi alma como un hierro candente. Por la noche, persigue mis sueños y los transforma en pesadillas.
Y a veces, cuando me despierto, está ahí.
De pie a los pies de mi cama, asombrado de mi existencia. Sin embargo, no es a él a quien más temo.
Hay otros que también tienen sus ojos puestos en mí.
Sólo que su obsesión es más profunda que la de Ridge y temo que si caigo bajo sus garras, no saldré viva de aquí. Hubo una vez un enfermo que acechaba en la niebla. Se cebaba en mi alma con el puño de hierro cerrado. Su mirada me hacía estremecer mientras sus ojos me encerraban bajo su hechizo. Pero tomar su mano puede ser mi única escapatoria de este infierno.
Mi primer año en la universidad ha sido todo menos ordinario.
Después de gastar tanta energía tratando de proteger mi secreto, me di cuenta de que no es el pasado lo que debo temer, sino mi futuro lo que está en juego.
Finalmente encontré a alguien que no me juzga por mis pecados y se queda a mi lado mientras atravieso los rincones sombríos de mi pasado.
El único problema es que sus amigos tienen otros planes.
Uno me observa día y noche, pintando un cuadro de una vida perturbada juntos.
Y el otro usa mi secreto como chantaje para ayudar en su propio plan.
Pero todos tienen una debilidad, y esa debilidad será la mía.
Había una vez un enfermo, que me observaba día y noche.
Su correa invisible, nunca me dejaba fuera de su vista.
Sus amigos eran diferentes a él, uno un monstruo que temía.
El otro sangraba carmesí, con un corazón puro.
Después de un comienzo difícil en mi primer año en la BCU, confiaba en que la amenaza había desaparecido.
Los asesinatos terminaron y mi nombre quedó limpio. Mientras tanto, tres hombres insospechados me tomaron por sorpresa...
Ridge, mi acosador convertido en amante.
Maddox, el príncipe azul que me enamoró.
Y Lev, mi villano que salió del agujero negro en el que había estado viviendo, mostrándome una versión de sí mismo que nadie pensó que volvería a ver.
Entonces todo cambió.
Alerta Campus: Refugiarse en el lugar. Sospechoso de homicidio en libertad.
Esa sospechosa... soy yo.
No soy inocente ni mucho menos, pero no he cometido los delitos de los que se me acusa. Alguien quiere atraparme, y es evidente que llegarán a extremos inimaginables para asegurar mi muerte.
Pero nací superviviente y resurgiré de mis cenizas, aunque primero tenga que arder.
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