Una guerrera sin nada que perder.
Un príncipe que intenta mantener unido su reino.
Cuando era niña, Etta huyó del palacio para salvar su vida.
Ahora, debe encontrar una manera de volver a entrar. El reino de Gaule es un lugar peligroso para aquellos con magia. Ser encontrado es una sentencia de muerte, lo que obliga a los portadores de magia a adentrarse en los bosques para esconderse de la corona.
Etta Basile ha pasado años entre los árboles, entrenando para el día en que acepte la maldición de sus antepasados, una maldición que vincula su vida a la de su mayor enemigo, el Príncipe de Gaule.
El príncipe Alexandre fue una vez su amigo de la infancia, pero ahora Etta debe mantener su identidad en secreto cuando ingresa a un torneo para convertirse en su campeona.
Sus metas son simples.
Protege al príncipe.
Rompe la maldición.
Mata al príncipe.
¿Para lo qué nunca la preparó su entrenamiento?
Enamorarse.
Pero el amor es para los débiles, y Etta no puede olvidar la razón por la que está allí. Su gente cuenta con ella.
Nunca te enamores del enemigo.
Si fuera así de sencillo.
Persinette Basile siempre ha sabido que la familia gobernante de Gaule estaba destinada a ser su enemigo. Sin otra opción, luchó para unirse a ellos de todos modos.
Y la destrozaran ahora que saben su verdadero nombre.
Mientras está sentada en su celda, sólo quiere una cosa: que el Reino de Gaule arda hasta los cimientos.
Pero la necesitan.
Cuando el rey es secuestrado, el reino recurre a la única persona que podría encontrarlo: la mujer atada a él por magia. Etta.
Secretos que alteran la vida.
Duelos mágicos. Un amor que podría destrozar dos reinos.
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