Poder.
Eso es lo que pienso cuando lo veo en Urgencias.
Poder y peligro.
Uno de los oligarcas rusos más ricos, Alex Volkov es tan despiadado como magnético. Siempre consigue lo que quiere, y lo que quiere es a mí, en su cama.
Es el tipo de problema del que toda mujer debería huir. La bala que su guardaespaldas recibió por él lo demuestra.
Debería mantenerme alejada, pero por una noche, cedo a la tentación. Antes de darme cuenta, me arrastra a su mundo de excesos y violencia, invadiendo no sólo mi vida, sino también mi corazón.
¿Cuánta confianza puedo depositar en un hombre tan peligroso? ¿Cuánto estoy dispuesta a arriesgar por su amor?
Día de medianoche: Mis instintos me advirtieron que Alex Volkov es un hombre peligroso. Mi mente me dijo que huyera cuando él puso sus ojos en mí con una determinación inquebrantable. No es que no intentara resistirme, pero Alex tenía un plan de acción. Siempre iba un paso por delante de mí atrayéndome hábilmente hacia su red. Incluso cuando me daba libertad, era sólo una ilusión.
Ahora, hasta esa ilusión se ha desvanecido. Soy su prisionera en el sentido más estricto de la palabra, llevada a Rusia en su avión privado. Ya no tengo nada que decir, no mientras nuestras vidas estén en peligro, y quizás nunca más. Nuestra historia se debate entre el desastre y la felicidad. Cada día que pasa, estoy menos segura de en qué lado caerá la moneda... o si siquiera sobreviviremos.
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