Érase una vez un multimillonario malhumorado y solitario y su inocente novia, que se encontraba en una situación muy complicada.
No era exactamente como me había imaginado el día de mi boda: vendida a un desconocido, un multimillonario frío que casi me doblaba la edad. Bryce Windsor apenas me miró mientras hacíamos nuestros votos. Prácticamente no pronunció una palabra después de haberme llevado a su remota finca. Me casé con él para salvar a mi hermano del sistema de acogida. No puedo romper el contrato, o perderemos todo...
Lo único que le importa a Bryce es que soy virgen, que soy suya y que no puedo dejarlo, pase lo que pase.
Bryce tiene un pasado oscuro, del que no quiere hablar. Y desde que mi madre murió, sé que soy la única en la que puedo confiar. Mi matrimonio arreglado no tiene remedio. Somos de dos mundos diferentes, y él es tan reservado, tan frío.
Aún así, alguien viene a mi habitación por la noche, me vigila.
¿Significa eso que, a pesar de lo que dice, lo que mi nuevo marido quiere es... a mí?
Parte 2 de 3.
Érase una vez un multimillonario malhumorado y solitario y su inocente novia, que se encontraba en una situación muy complicada.
No era exactamente como me había imaginado el día de mi boda: vendida a un desconocido, un multimillonario frío que casi me doblaba la edad. Bryce Windsor apenas me miró mientras hacíamos nuestros votos. Prácticamente no pronunció una palabra después de haberme llevado a su remota finca. Me casé con él para salvar a mi hermano del sistema de acogida. No puedo romper el contrato, o perderemos todo...
Lo único que le importa a Bryce es que soy virgen, que soy suya y que no puedo dejarlo, pase lo que pase.
Bryce tiene un pasado oscuro, del que no quiere hablar. Y desde que mi madre murió, sé que soy la única en la que puedo confiar. Mi matrimonio arreglado no tiene remedio. Somos de dos mundos diferentes, y él es tan reservado, tan frío.
Aún así, alguien viene a mi habitación por la noche, me vigila.
¿Significa eso que, a pesar de lo que dice, lo que mi nuevo marido quiere es... a mí?
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