Le lavaron el cerebro para creer que podía salvar a la humanidad.
Ahora, ella es la que necesita ser salvada.
Abandonado con sus dos hermanos menores, Milo Vega fue colocado en un hogar de acogida. Ahora, como estudiante de secundaria de veinte años, cubierto de tatuajes de pandillas y que trabaja como conserje de la escuela, está viviendo una vida muy diferente a la que estaba destinado.
Cuando otra hija adoptiva se une a la familia, ésta de una institución psiquiátrica, Milo es escéptico. Una rara condición genética la hace diferente a cualquier chica que haya visto, y no quiere tener nada que ver con la que llama la Chica Fantasma.
A pesar de su renuencia, sus instintos protectores aumentan cuando ella se inscribe en la escuela y, eventualmente, una amistad poco probable crece entre ellos. Cuando un evento trágico rompe su frágil psiquis, Milo se enfrenta a la posibilidad de no volver a verla más.
A menos que arriesgue todo para salvarla.
Milo le vendió su alma al diablo para salvar a un ángel.
Ahora busca venganza.
Hay peores prisiones que la exuberante propiedad de un famoso narcotraficante en México. Mercy vive sus días sola y escondida del mundo, pero su sueño está plagado de pesadillas sobre los muti y todos los niños y niñas como ella que no tuvieron la suerte de escapar.
Si las personas que la retuvieron cuando era niña están en México, ¿es posible que pueda encontrarlos?
Lo que comienza como una justicia vigilante desenreda una red de trata de personas más profunda y oscura de lo que Milo y Mercy podrían haber imaginado. Cuando se encuentra cara a cara con las personas que alguna vez consideró familia, demuestra que está lejos de ser el ángel para el que la criaron.
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