Se arrepentirá del día en que me convirtió en su enemigo.
Ella es la princesa del Whitney, el principal hotel de la ciudad de Nueva York.
Su imperio es como un cuento de hadas. Pero no hay felices para siempre en esta historia. Porque hay consecuencias por romper un contrato de una década sellado con sangre, y ahora debe pagar el precio. Debido a mi poder, conexiones y nuestro pasado, la realeza de Manhattan no tiene más remedio que recurrir a mí en busca de ayuda.
El villano de la historia.
Peligroso. Vengativo. Posesivo. Soy muy temible en la élite del bajo mundo. También soy la única persona que puede salvar su legado.
Encerrada en mis garras, debe jugar mi perverso juego de venganza.
Ella no tendrá más remedio que caer de rodillas, rogar y sacar su pluma oscura para firmar un contrato con el Diablo.
Cometió dos errores.
El segundo fue pedirme ayuda.
Nunca querrás enfrentarte a mí.
Soy al que la élite confía sus oscuros secretos.
El que limpia sus sucios errores y oculta sus siniestros actos.
Ella vino a mí, vulnerable y sola, sin saber que sólo era un peón en un juego vicioso.
Cuanto más se esfuerza, más fuerte la sujeto.
Peligroso. Mortal. Posesivo.
La mantendré a salvo de cualquiera que se atreva a hacerle daño... de todos menos de mí.
Usaré sus secretos para reclamarla.
Soy tanto el villano como el salvador en esta historia.
Pero nadie la salvará de mí.
Cree que puede ganar contra mí... se equivoca.
Soy el mejor ladrón de arte en el negocio.
No toleraré que nadie invada mi territorio... y eso incluye a Valentina Key.
Ella puede ser hermosa, inteligente y talentosa, pero en nuestro submundo del crimen, yo soy el rey.
Está a punto de aprender que estoy dispuesto a hacer cualquier cosa para ganar. Y eso incluye seducirla para que se someta.
Peligroso. Territorial. Posesivo.
Pero ahora nuestro juego del gato y el ratón se ha vuelto mortal.
Ha cometido un grave error.
La gente poderosa quiere su sangre. Yo soy el único que puede salvarla.
Por desgracia para ella, no soy un héroe.
Si quiere mi ayuda, va a tener que arrodillarse y rogarme por ella.
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